Un nuevo movimiento misionero está surgiendo en América Latina, con miles de jóvenes participando en programas de evangelización. Los líderes cristianos reportan un crecimiento significativo en la participación de la juventud en actividades parroquiales.
El movimiento, que comenzó en Brasil, se ha expandido a países como Colombia, Argentina y México. Según el Padre Miguel Ángel, coordinador de la iniciativa, «los jóvenes están buscando respuestas espirituales y encuentran en la misión una forma de servir y crecer en su fe».

